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Seguro que has oído hablar en algún momento de Bitcoin, ether, dash o litecoin. Son nombres que identifican a algunas de las «criptodivisas» (también llamadas monedas virtuales, criptomonedas o divisas virtuales) más conocidas que existen en la actualidad.
Las criptodivisas nacieron con el propósito de permitir la realización de transacciones económicas o intercambios de bienes (físicos o virtuales) y servicios sin necesidad de intermediarios. Por tanto, lo que tienen en común la mayoría de ellas -y la diferencia del dinero tradicional- es que se crean electrónicamente, se basan en la red P2P, se apoyan en la tecnología Blockchain[1] y se emiten al margen de los bancos centrales sin responder al control de ningún país o institución.
Comenzaron a utilizarse en 2009 con la aparición del Bitcoin, como método alternativo al sistema financiero tradicional, y su existencia se ha ido extendiendo poco a poco entre la población (aquí el texto de Satoshi Nakamoto donde se anuncia la creación del Bitcoin y se explica su funcionamiento).
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Esta es una traducción automática de un artículo publicado por Business Insider en otro idioma. Las traducciones automáticas pueden generar errores o inexactitudes; seguiremos trabajando para mejorar estas traducciones. Puede encontrar la versión original aquí.
Las criptodivisas han estado en boca de todos en las últimas semanas debido a su fuerte subida de precio y al popularizado dogecoin, ambos impulsados en cierta medida por los tuits de Elon Musk.Otros inversores institucionales y grandes empresas también han mostrado su apoyo a estos activos en los últimos meses. Es significativo el caso de Paypal, que impulsó el precio del bitcoin en octubre y marcó el inicio de un rally alcista en el que la criptodivisa sigue montado.Animados por la subida de precios y el respaldo institucional, muchos inversores particulares se han lanzado a invertir en criptodivisas. Hacerlo no es tan fácil como parece: una vez compradas, hay que almacenarlas en monederos digitales: pueden ser tanto físicos como virtuales, y suelen tener sistemas de verificación en dos pasos y largas contraseñas.La solución de la startup española Bitnovo para acabar con las complejidades del proceso fue empezar a vender cupones canjeables en establecimientos físicos como Fnac, Worten, Game y Eroski, entre otros, por importes a partir de 25 euros.
Bitcoin
Una tarjeta de regalo, también conocida como certificado de regalo o vale de regalo, es una tarjeta prepagada de valor almacenado emitida por una marca o un minorista. Se utiliza como alternativa al dinero en efectivo para las compras en una tienda determinada. Así, por ejemplo, si tiene una tarjeta regalo de 200 euros de Amazon España, puede comprar hasta 200 euros en productos de la tienda Amazon.es canjeando la tarjeta regalo en lugar de pagar con tarjeta de crédito.
Las tarjetas regalo pueden canjearse en línea en el sitio web del minorista y/o directamente en la tienda. Depende de la política del minorista. Las tarjetas regalo que se utilizan en línea suelen tener un código pin que hay que introducir en el sitio de comercio electrónico del minorista. Las tarjetas regalo que se utilizan en la tienda del minorista a veces contienen un código de barras. Por lo general, puede imprimir el código de barras o guardar una copia del mismo en su teléfono y mostrárselo al cajero cuando pague.
Una cosa interesante que debes saber es que las tarjetas o vales regalo son anónimos. Así que, como su nombre indica, puedes utilizarlas para tus propias compras o regalarlas. ¿No es genial? Puedes usar bitcoin para hacer un buen regalo a un amigo o a un ser querido.
Binance
Un grupo de personas convencidas de las ventajas y el potencial de la criptomoneda Bitcoin ha decidido crear una ‘calle bitcoin’ en Barcelona. Se trata de una iniciativa que imita a la que se puso en marcha en Madrid hace unas semanas y que permite que los clientes de más de 20 comercios de la calle Serrano (en la famosa ‘milla de oro’ madrileña) puedan realizar sus compras con esta moneda tan polémica como popular.
El objetivo de crear una segunda ‘calle Bitcoin’ en España, la primera está en Madrid y la segunda en Barcelona, es hacer que un mayor número de comercios de una misma zona ofrezcan esta nueva forma de pago a sus clientes.
En el distrito de Ciutat Vella, una calle con comercios «separados por menos de 500 metros», cuyo nombre aún no ha sido revelado, se convertirá en la segunda ‘calle Bitcoin’ de España. Pero, ¿por qué en Ciutat Vella? Por su condición turística, su céntrica ubicación y su alta concentración de comercios, aclara Borja Rossell, uno de los promotores de la iniciativa y CEO de BTCpoint, una startup dedicada a la producción e instalación de cajeros de bitcoin.
